11 enero 2010

Operación Dragón


Bruce Lee murió envenenado por treinta disparos al corazón
mientras empaquetaba las escamas de un dragón invisible
para venderlas en el mercado negro de Transilvania.

Fue director de cine, navegante y proxeneta
en el centro rocoso de Marte,
Bañado en sangre enemiga desde la infancia
alcanzó la iluminación
filmando una película sobre la sexualidad neón de Elvis Presley,
que se convirtió en un clásico de la filmografía de Laos.

Bruce Lee, revólver de tigre
Bruce Lee, lengua de telescopio
Bruce Lee, martillo de los desposeídos

Rodeado de televisores de plasma
Se fue con la vida
incendiando los rascacielos, los cafés de chinos y las ensaladas de papa
que le salían al paso,
Se fue como un mesías sin barba,
poeta y testigo
de los rastros explosivos de nuestra aceleración.

De: R.F. A. 40

1 comentario:

Pesadilla dijo...

el penúltimo profeta, antes de rockdrigo